>>>robé la idea

de todas maneras pedi permiso

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Tomaba café

en la noche cuando la luna era clara

y me sentaba cuando tenía la pantalla en mi pieza

a escribirle a mis deseos.

Algo tenía su aroma, el vapor
o quizás el azúcar eran elementos que me daban la inspiración para programar mis versos en hojas que aguantaban de todo.

Recuerdo que a media noche me levantaba,

sacaba de la alacena el frasco transparente y desvelada

vaciaba el contenido de una cuchara en el botellón sin base

con agua hirviendo,

varias veces se paseaba mi mano

hasta llegar a obtener las cinco sagradas

gotas de café saboreado
que terminaba en mi paladar
saciando mi sed de escritora.

Sentía que sin él

mis dedos no fluían en la partitura,

o que algo faltaba a la hora de pensar en el último reglón de poesía.

Durante mis pensamientos

mi nariz se deleitabacon el vapor

y me llegaban esas palabras justas

a mi mente para exponerlas luego.

Supongo que refleja una etapa de mi vida

aquel café,

aquellas tazas que se apozaban en mi pieza de hojas,

de libros con rosas,

de fotos sin nadie.